Tangaria es un roguelike multijugador de código abierto, inspirado en Angband, lo que quiere decir que a nivel temático está cimentado en la mitología de Tolkien. Para ser más exactos, la acción del juego transcurre durante la Cuarta Edad, con Morgoth despierto y en activo. De hecho, tal y como ocurre en Angband, podremos vernos las caras contra el mismísimo Morgoth.
Lo primero que tendremos que hacer antes de adentrarnos en la Tierra Media, será crear a nuestro héroe. Es importante tener en cuenta que no tenemos que registrarnos en ninguna parte. Podemos poner el nombre de usuario y contraseña que queramos. Tras esto, podremos crear a nuestro héroe eligiendo entre docenas de razas y clases diferentes, incluyendo humano, enano, semi-troll, guerrero, pícaro, explorador, etcétera. Tendremos cientos de combinaciones a nuestra disposición.
Una vez hayamos creado a nuestro personaje, descubriremos que Tangaria es un roguelike con un mundo enorme y totalmente abierto. La aventura no es lineal, sino que podremos hacer lo que queramos, moviéndonos con total libertad por el mundo, hablando con NPCs u otros jugadores, adentrándonos en mazmorras, y mucho más. Las mazmorras, de hecho, son destructibles: con el hechizo correcto podremos destrozar prácticamente cualquier elemento del escenario.
Uno de los aspectos que hacen a Tangaria totalmente único es su componente multijugador. Por un lado, tendremos el clásico PVE, que nos permitirá crear nuestra propia Comunidad del Anillo con otros jugadores y combatir el mal codo con codo. Y por otro lado tenemos el PVP, en el que podemos enfrentarnos a otros jugadores en emocionantes duelos a muerte.
Tangaria es una experiencia absolutamente única, que combina lo mejor de dos mundos tan dispares como los roguelikes y los MMORPG. Es un juego, eso sí, exigente, al que le tendremos que dedicar al menos una hora de aprendizaje si queremos conocernos bien los controles y algunas de las mecánicas más complejas.
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